QUIÉNES SOMOS

En nuestro caso el amor por la naturaleza nos llego a ambas desde muy chicas, unido a la familia y como lo vivian nuestros padres. En un caso el sur, las plantaciones de frutales, el lago y la montaña, en el otro, la pampa plana y austera y un parque antiguo y formal. Creemos que es en esta etapa donde quedan grabadas las sensaciones más fuertes, los recuerdos que, como los infraleves de Duchamp, son después la materia de nuestra obra. Parte del trabajo del diseñador es volver a estos recuerdos, despertarlos, reconocerlos, darles un tiempo y lugar en nuestra sensibilidad, tenerlos al lado del tablero y cerca del lápiz de dibujo.

En los jardines hemos encontrado un universo variado de seres humanos y de saberes. Cuando hablamos sobre jardines hablamos de tierra, fertilidad, humedad, riego y drenaje, temperaturas y vientos, asoleamiento, y también de atardeceres, sombras frescas y rincones de sol cálido en invierno, de plantas y de personas, de arte, arquitectura, color y recuerdos. n como un espacio, como una escultura viva. en la que vivimos y nos movemos pero también como una experiencia subjetiva y sensible que nos conmueve como una obra de arte.

“Nos interesan mucho más las preguntas que las respuestas, abrir puertas y caminos para recorrer más que plantear una postura, y el proceso más que el resultado. Cada pregunta es una invitación a ir más allá de la respuesta fácil, a replantearnos los lugares comunes, una invitación a repensar los paradigmas.

Implica un dialogo, un intercambio, la validez de posturas distintas y la posibilidad de construir desde la diferencia”.

Es el ámbito familiar y privado y también el paisaje más allá de los límites del terreno, y es un micro universo y a la vez parte de un gran ecosistema. El jardín es un péndulo que toca los temas más prácticos y los más sublimes, se acerca a la experiencia más íntima y personal y se extiende para abarcar el paisaje y la cultura de una zona, nos hace mirar a través de un microscopio así como levantar la vista para captar el recorrido del sol.
El jardin también es materia, es piedra y toneladas de tierra, es la fermentación del compost y los residuos de la poda. Es también construcción del hombre, es arena y ladrillos, plataformas de madera y losas de hormigón, muros de retención y escaleras, es estructuras, piletas y pérgolas. El jardín puede extenderse más allá de mi terreno en largas vistas, convertirse en el horizonte lejano, en el sol que entra por el este a la mañana y la lluvia que moja la tierra.
El jardín abarca la vida y la muerte, la flor, el fruto y la semilla, cambia y muta con el tiempo y con las estaciones. Es un espacio que, a veces, parece vivir de intangibles, de recuerdos de la niñez, del ruido del viento o el sonido de una fuente, de perfumes y sombras, del vuelo fugaz de un picaflor entre las salvias y la emoción del primer brote de la ampelopsis.
Pero para nosotras un verdadero jardín es mucho más que la suma de todos estos elementos, el jardín es una entidad en sí misma, el jardín que buscamos tiene alma.